Escribe: José Luis Blasina
Vale la pena volver sobre estos temas, sobre los métodos de análisis de la realidad concreta. Suelen escucharse menciones sobre algunos logros aislados de una realidad mucho más rica en el rubro Seguridad Social. Si se transmiten cada uno de los avances más importantes, como si fueran «compartimentos estancos», no resulta fácil llegar a una concepción integral del sistema. No estoy diciendo con esto, que siempre el momento y el lugar desde donde se realizan referencias a estos logros, dé tiempo para contextualizarlos.
A veces no es posible. Pero no siempre.
Lo importante para enriquecer el mensaje es ser portadores y transmisores del concepto de integralidad cada vez que se presenten oportunidades de explicitarlo. Por lo pronto, los hechos, los porfiados hechos, hacen que no se pueda disociar la Seguridad Social de la Protección Social. Sencillamente porque la integralidad da cuenta de la calidad de vida de los sectores más necesitados.
Por ejemplo y sin intentar agotar la lista de los avances logrados. además de los nuevos montos de las pasividades, sobre todo de las mínimas, se las relacione por ejemplo, con la marcha del Sistema Nacional de Cuidados, del Sistema Nacional Integrado de Salud aunque requiera ajustes- del Plan Ibirapitá, que ya llegó a las 100.000 «tablets» entregadas, con instrucción previa, básicamente en el Interior del País, y con las 27.000 programadas para Montevideo este año, junto con otras localidades del interior, para llegar a la meta de 300.000 al final del período de la actual administración.
Termino esta nómina con la “Operación milagro” del Hospital de ojos José Martí., formidable avance social y de profundo contenido humanitario, habiendo superado ya las 67.000 operaciones de cataratas y otras afecciones visuales, de manera totalmente gratuita, para quienes no pudieron pagar en su momento lo que cobraban las clínicas privadas.
Lo otro a resaltar, con fuerza, es que ninguna de las cuatro conquistas mencionadas reconoce antecedentes en la historia del país
Y la del «estribo”: Todo lo mencionado fue posible por la llegada del Frente Amplio al Gobierno Nacional
Estas y otras muchas cosas que aún no han llegado a la dimensión debida, las vinculan estrechamente a la necesidad de continuar transitando este camino.
Por allí vamos hacia el Uruguay del futuro, sin prisa y sin pausa.
Con nuestra responsabilidad irremplazable a cuestas.
Montevideo, 15 de febrero 2017