Más de 20.000 familias lograron una solución habitacional a través de la Cartera de Tierras de la Intendencia de Montevideo, que está cumpliendo 25 años.
El intendente Daniel Martínez expondrá sobre esta política departamental, hoy a la hora 14 en la sala Ernesto de los Campos de la sede comunal (Avda. 18 de Julio 1360, piso 2).
La exposición será en el marco del encuentro Intercambio sobre los 25 años de la Cartera de Tierras. La experiencia será un aporte de Montevideo a la construcción de una nueva agenda urbana durante Hábitat III, la conferencia de Naciones Unidas sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible que tendrá lugar en Quito (Ecuador) del 17 al 20 de de octubre de 2016.
Creada en 1991, la Cartera de Tierras lleva adjudicadas más de 400 hectáreas para la construcción de viviendas. Actualmente cuenta con un centenar de predios, la mayoría ya adjudicados a cooperativas y otros reservados para realojos.
“La Cartera de Tierras de la Intendencia de Montevideo es la herramienta estatal más importante para que los sectores populares, fundamentalmente trabajadores, tengan acceso a la vivienda”, afirmó Daniel Espósito, director de Tierras y Hábitat de la Intendencia capitalina.
Espósito indicó que a principios de la década de 1990, a partir de la Cartera de Tierras, “comenzó por primera vez en la historia del país la regularización de asentamientos precarios. Años después surgió el Programa de Integración de Asentamientos Irregulares (PIAI), en coordinación con el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo”.
Otra línea de acción fue la recuperación de viviendas en Ciudad Vieja y Centro. La IM compró las fincas, contrató institutos técnicos y organizó a vecinas y vecinos en cooperativas. La primera experiencia fue Covicivi, sobre la rambla portuaria, y posteriormente, durante la misma década, se concretaron diez proyectos piloto de recuperación de viviendas.
El director de Tierras y Hábitat señaló que la Cartera también ha sido un elemento fundamental en el ordenamiento y planificación de la ciudad. “Nos ha permitido orientar la construcción de viviendas hacia zonas donde es necesario el zurcido de la trama urbana. Allí donde se detectan vacíos, mediante expropiación o compra a través de licitación, se adquieren terrenos para fomentar la construcción y radicación”, dijo.
Espósito explicó que “Montevideo cuenta desde 1998 con un Plan de Ordenamiento Territorial que normatiza el crecimiento urbano. Allí están identificadas las zonas aptas para desarrollos urbanos y en ellas reservamos áreas para la construcción de viviendas a través de la Cartera. En el Programa de Actuación Urbana (PAU) 9, ubicado en camino Veracierto, se desarrolló el barrio cooperativo Zitarrosa. En el PAU 8, sobre Camino Maldonado, se ubicaron la cooperativa Pablo Estramín y las viviendas de realojo Vista Linda”.
Otro programa de la Cartera es el de Lotes con Servicios, que también está incluido en el PAU 8. “En este caso otorgamos préstamos, planos y asesoramiento técnico para que una familia concrete su vivienda por el sistema de autoconstrucción”.
Espósito destacó que los predios adjudicados cuentan con todos los servicios: saneamiento, drenajes, luz eléctrica, agua potable y pavimento, entre otros. Acotó que el dinero que reintegran las cooperativas beneficiadas va a un Fondo Rotatorio Solidario cogestionado por la Intendencia y las cooperativas, que permite sustentar y extender la operativa.
“La Cartera de Tierras de la IM es la política de Estado que ha tenido mayor permanencia desde el retorno a la democracia. Ha sido tomada como ejemplo por otras intendencias del Interior y muy bien valorada a nivel internacional”, concluyó el director de Tierras y Hábitat.
Fuente: La República
29 de julio 2016