¡Hasta siempre Saúl!

*Por Saulo Diaz

Hasta siempre compañero Saúl

En el día de ayer nos levantamos con la triste noticia de la desaparición física de nuestro entrañable compañero Saúl Correa.

Sin lugar a dudas dicha noticia impacto y conmociono en primera instancia a todo el pueblo Frenteamplista y en particular a los Socialistas que lo conocíamos cabalmente.

No obstante, Saúl, además de militar fuertemente por el FA y por su partido, fue Sindicalista, Maestro, Docente en Secundaria, Periodista deportivo, Relator de futbol (el único relator en la década de los 60’ cuando Tacuarembó del interior ganaba todo), por lo tanto nuestro querido compañero también genero profunda tristeza en distintas ámbitos donde desarrollo su tarea, siendo reconocido por su impecable labor, en la “VIII Noche de los Homenajes en Club Tacuarembó” que le hiciera el Círculo de Periodistas en el año 2011.

Saúl era de aquellos políticos de fuste, que no le tenía miedo al confrontar con nadie, ni en ningún lugar, era de esos que decía lo que pensaba sin escatimar palabras.

Reconocido en la Junta Departamental por sus encendidos y potentes discursos, propio de alguien que siente con apego y con fundamentos sus máximas convicciones.

Saúl le volcó al FA, al Partido y a la gente todo de sí, hasta el último día.
Su pasado de Exilio en la República Argentina, lo empujo desde siempre por la búsqueda de la verdad, justicia y nunca más terrorismo de estado y desde su lugar siempre apoyo y colaboro esta causa hasta el último de sus días. Recuerdo a Saúl hace unos meses cuando se colocó la placa conmemorativa en el Regimiento Nº 5 de Caballería Blindado, que fue centro de detención y tortura entre 1973 y 1985, él estaba presente en primera fila y todos veíamos como sus lágrimas corrían por su rostro, lágrimas de felicidad decía el, “de estar por lo menos un pasito más cerca”.

Siempre nos recalcaba en cada convención o en cada reunión en el FA o en el comité de base; “la política no es para enriquecerse ni para buscar ningún carguito, la política es para cambiar las cosas”, digno de un compañero que sentía en carne propia los principios y la ética que deben primar cuando uno milita políticamente.

A todos los jóvenes siempre nos cautivó esa claridad conceptual en lo político, esa visión concreta de lo que había que hacer en temas complejos, constantemente marcando el rumbo de a donde teníamos que ir, propios de un político de la jerarquía de Saúl.
Si hubiese imprescindibles seguramente se parecerían mucho a él.

Hoy lamentablemente ya no está con nosotros, el partido ya lo extraña, el FA ya lo extraña.

Mi más sentido pésame y abrazo afectuoso a todos sus familiares, en particular a Stella e Inés.
Pero como repetía José Pedro Cardoso, «Los socialistas no mueren… Se siembran»

¡Hasta siempre, Saúl!

*Edil Departamental por el Partido Socialista,  Frente Amplio. Integrante del Comité Central del PS.