El Partido Socialista de Uruguay saluda al pueblo hermano del Perú por la jornada democrática del pasado domingo en la que eligieron un nuevo Presidente de la República.
Si bien quedan unas pocas actas por contabilizar, al día de hoy los resultados que otorgan la victoria al Profesor Pedro Castillo del partido Perú Libre son irreversibles.
De esta manera un maestro rural y dirigente sindical, que cuenta entre sus apoyos a varias organizaciones populares y partidos de izquierda, es electo Presidente de la República del Perú.
Los resultados del proceso electoral demostraron una vez más el desprestigio de los partidos políticos así como la profunda desigualdad y división de la sociedad peruana, producto de una acumulación de injusticias y segregación que hoy vuelve a desembocar en una brutal crisis agudizada por la pandemia. También expresan la esperanza depositada por parte de los sectores históricamente oprimidos y relegados del Perú en un cambio de raíz, que implique entre otras cosas un proceso de reforma de la Constitución, una transformación profunda de estructuras extremadamente desiguales e insolidarias y un combate frontal a la corrupción.
Desde Uruguay, en cercanía con las y los socialistas peruanos y con la clase trabajadora y los pueblos empobrecidos del Perú, manifestamos nuestra alegría por una nueva derrota del proyecto fujimorista, responsable de políticas criminales en el pasado. Justamente Keiko Fujimori ha sembrado terror durante toda la campaña e intenta ahora poner en duda los resultados surgidos de las urnas.
Finalmente, siendo conscientes de las muchas dificultades e incertidumbres -además de la fragmentación política que se expresa en el Congreso electo-, hacemos votos para que el gobierno que asumirá pueda cumplir, apoyándose en la participación de la sociedad peruana, con sus compromisos de cambio profundo, democrático y en paz. Perú no se merece una nueva frustración. El pueblo peruano, al igual que otros pueblos de nuestra América, no se resigna y sigue buscando caminos para construir un modelo de libertad, igualdad, democracia y justicia ecológica, a favor de los pueblos originarios, las mayorías trabajadoras, las mujeres y las minorías discriminadas, y que apueste a la imprescindible integración de América Latina.
10 de junio de 2021.