Los comités del FA de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de la República (Udelar)en debate tributario
El sábado, durante un debate tributario que se realizó en La Huella de Seregni, organizado por los comités del FA de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de la República (Udelar), el dirigente socialista Daniel Olesker también expresó su «particular preocupación por el diferimiento de los gastos» de la Administración Nacional de Educación Pública, la Universidad de la República, el INAU y la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE). Remarcó que se trata de una reducción de gastos, y no de una postergación, ya que lo que no se gasta en 2017 no va a gastarse luego, y que eso dificulta, por ejemplo, que se llegue al 6% del Producto Interno Bruto (PIB) para la educación. Advirtió que el gasto que se posterga, por ejemplo en la Udelar y el INAU, corresponde a salarios, y que hay convenios firmados que corren el riesgo de no cumplirse. «Es un problema político importante», advirtió Olesker.
Hegemonía y credibilidad
En el debate participaron Olesker, el dirigente socialista Fernando Isabella, el diputado de Asamblea Uruguay José Carlos Mahía y el economista del FA Jorge Notaro. Isabella remarcó la importancia de dar la batalla por la hegemonía cultural contra el concepto de que «cada uno gana según su esfuerzo». Mahía dijo que en esto hay «una cuestión de clase», porque «hay mucha gente que se levanta muy temprano y gana muy poca plata y ni siquiera llega a tributar IRPF». Isabella sostuvo que «el mercado no distribuye según mérito; no es verdad que gana más el que se esfuerza más. Hay miles de personas que se rompen el alma trabajando de sol a sol y no pagan IRPF». Mencionó, entre otros datos, que 70% de los primeros empleos se consiguen por contactos, y en eso son centrales las redes sociales que tiene cada individuo. «Si no logramos generar conciencia de eso, no va a haber reforma que aguante, ahí vamos a perder a largo plazo», advirtió.
Notaro dijo que uno de los efectos de las medidas adoptadas podría ser la pérdida de credibilidad del FA. «¿Habrá militancia política del FA capaz de demostrar que es una necesidad histórica [el ajuste tributario] y que el FA no pierda credibilidad? ¿Se gana adherentes o se expulsa adherentes? ¿Se contribuye a la paz social o se agudizan los conflictos con el movimiento sindical y con la Udelar?», preguntó. Mahía reconoció que el FA «se comprometió con determinadas metas en la campaña y después no las pudo sostener», pero que eso se debió a que cambió la coyuntura económica. Hubo señalamientos críticos a la magnitud del déficit fiscal en el segundo gobierno del FA y dudas sobre si la rebaja del IVA efectivamente tendrá un efecto redistributivo, ya que sólo beneficiará a quienes utilizan tarjetas.
Olesker e Isabella recordaron los planteos del PS de subir las tasas del Impuesto al Patrimonio, elevar el Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales y eliminar la devolución del Fondo Nacional de Salud. Olesker mencionó la posibilidad de incorporar títulos de deuda pública al IRPF que grava el capital y topear los sueldos de los directores de las empresas públicas no estatales, y remarcó que se necesita lograr recursos que superen el punto de déficit que se procura reducir. «No es defendible el cambio al IRPF si no hay cambios en la tributación del capital», sostuvo.
Fuente: La Diaria
13 de junio 2016