Un rostro sereno que refleja la tranquila firmeza de las convicciones maduradas en la reflexión y corroboradas en la praxis.Es más que una mirada de mujer ante el símbolo de la opresión, es el símbolo de la voluntad innegable de quienes luchan por la libertad y como tal, aúna a mujeres y varones . En sus 90 años hacerle saber que hay jóvenes generaciones que cultivan el gesto altivo de la democracia y la mirada serena para continuar peleando por la libertad, la democracia y el socialismo es el mejor de los regalos navideños que podemos hacerle y en ella el homenaje a las mujeres luchadoras en defensa de derechos y principios . Bien cumplidos y enhiestos 90 y se puede ir por más para continuar sembrando enseñanzas de vida y lucha.
Garabed Arakelian